“Estamos viviendo un momento muy complicado, marcado evidentemente por la crisis económica, y la gente tiene derecho a quejarse y a ser escuchada. El aumento de consultas y quejas y la indefensión que sienten muchos ciudadanos justifican de sobra la existencia de un órgano independiente como es el Diputado del Común". De esta forma se expresa Carla Melgarejo Hernández, asesora del Diputado del Común en Lanzarote desde el pasado 22 de diciembre de 2011, y encargada, dentro del organigrama encabezado por Jerónimo Saavedra en las siete islas canarias, de las áreas de Vivienda, Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias. Jerónimo Saavedra supo de esta joven abogada por haber sido durante varios años asesora del desaparecido Nicolás de Páiz. Y lo hizo por varias razones, no sólo porque es la persona idónea para el puesto al conocer perfectamente su funcionamiento, sino porque es trabajadora del Cabildo de Lanzarote. Es en estos momentos, cuando incluso se cuestiona por cuestiones económicas la necesidad o no de mantener una figura tan importante como ha sido la del defensor del pueblo, cuando medidas de este tipo hablan bien de la gente que quiere hacer las cosas de otro modo.
El próximo 30 de mayo el Diputado del Común, designado por el Parlamento de Canarias para defender los derechos de los ciudadanos, termina el plazo para trasladar a la Cámara autonómica el informe con los datos, quejas, consultas y reclamaciones ciudadanas de 2011. Ha sido un año que como recuerda su representante en Lanzarote ha estado marcado por la crisis, “un año duro”, que por desgracia incluso pinta mejor que el presente 2012. Si la crisis marca el devenir diario en el mundo de la política, ni que decir tiene que marca también el trayecto vital de todos los ciudadanos. Son los ciudadanos, como recuerda la asesora del Diputado del Común, los que más de cerca la están padeciendo. Sólo en 2010 se registraron 1.378 quejas en Canarias, 60 de ellas en Lanzarote, de las que 24 fueron archivadas. Las previsiones apuntan a que en el último ejercicio del Diputado del Común se recibieron más de 1.500 reclamaciones de ciudadanos en las Islas. “Si no hay más quejas registradas hasta ahora es sobre todo porque la gente desconoce la existencia de esta figura”, explica Melgarejo. Ahí reside la clave de gran parte de la función que deben desempeñar los nuevos inquilinos de la institución, hacer llegar a la población la importancia del trabajo que desempeñan. “Nosotros somos el recurso que hay que utilizar cuando cualquier persona entiende que han fallado el resto de instituciones, y debe hacerlo porque aquí estamos para ayudarle, para escucharle”, subraya. Esa función, la de psicólogo del pueblo, es vital, porque en ocasiones el trato que reciben muchos ciudadanos provoca una enorme frustración que conduce a un sentimiento negativo que gracias a la oficina del Diputado del Común se canaliza. “Yo animo a la gente a que venga por aquí, porque incluso hay veces en las que el ciudadano se confunde, pero le explicamos por qué se confunde. Hasta ahora estamos trabajando mucho, y no he visto a nadie que se haya marchado con la sensación de que su problema no se tiene en cuenta”, afirma segura de que se están haciendo bien las cosas.
Lo importante es que la oficina, que se encuentra a dos pasos del Palacio de Justicia de Arrecife, está siendo muy útil, viendo el número de personas que cada día pasan por allí. "Queremos ser ambiciosos en ese sentido, y que no haya una sola persona que por desconocimiento de nuestra existencia se quede sin reclamar lo que en justicia le corresponde", insiste Melgarejo.
De las 1.378 quejas ciudadanas que recibió el Común en Canarias en 2010, 969 se registraron en las propias oficinas de la institución -en Lanzarote el Común tiene su sede en la Rambla Medular, número 99, 2ª planta, en horario de 08:00 a 14:00 y hasta las 15:00 en invierno-; 168 llegaron por correo electrónico; y 110 vía postal; 77 mediante fax (928807800 en Lanzarote); 44 fueron remitidas al Común desde otra administración; hubo 7 actuaciones de oficio; y 3 remitidas vía burofax. La asesora del Común en Lanzarote explica que en el teléfono 928812407 pueden conseguirse citas previas, al igual que en la web www.diputadodelcomun.org, que también permite realizar consultas express y organizar visitas concertadas.
Funcionamiento del Diputado del Común
Carlota Megarejo explica como asesora del Común desde Lanzarote que cuando un ciudadano presenta una queja, consulta o reclamación contra alguna Administración pública, lo primero que hace la institución a la que pertenece es recabar del organismo o dependencia administrativa afectada la remisión del informe que proceda. "Las administraciones, sean cabildos, ayuntamientos, el Gobierno autónomo, están obligadas a auxiliar de forma preferente y urgente al Diputado del Común en el cumplimiento de sus funciones", afirma. Así lo establece la Ley 7/2001 de 31 de julio, que establece que a la petición de informe le siguen las fases de reanudación, sugerencias, advertencias y, finalmente, la recopilación de los datos en el informe del Diputado del Común. "Una vez investigada la reclamación, el Diputado del Común puede remitir a la Administración Pública afectada sugerencias, advertencias, recomendaciones y recordatorios de deberes legales. También tiene capacidad para actuar a iniciativa propia (de oficio)", sostiene la asesora del Común en Lanzarote.
Pero, ¿qué ocurre si alguna administración se niega a colaborar o a facilitar el informe requerido por el Diputado del Común? Dado que la figura que actualmente ostenta Jerónimo Saavedra tiene la facultad de investigación, pero también de denuncia, en ese caso el Defensor del Pueblo reitera su petición y si el silencio administrativo persiste, el Común debe proceder al recordatorio y entonces tiene la potestad de realizar una declaración por obstruccionismo e incluso, si se observaran indicios de irregularidades, trasladar el caso a Fiscalía.
¿Qué puede hacer por mí el Diputado del Común?
La actuación del Diputado del Común es gratuita y confidencial. No precisa la intervención de abogado, procurador o gestor. El Común puede investigar cualquier actuación de las administraciones públicas canarias que vulnere los derechos de las personas, como por ejemplo:
- Retraso indebido en la actuación administrativa.
- Error o arbitrariedad en la aplicación de las normas.
- Silencio administrativo ante las peticiones ciudadanas.
- Trato incorrecto al ciudadano.
- Negativa injustificada a facilitar información.
- Inejecución de las propias resoluciones adoptadas.
Lo que No puede hacer
El Común no puede intervenir en conflictos de intereses entre particulares, en asuntos que se encuentren pendientes de resolución judicial o sobre los que haya recaído sentencia. Tampoco puede admitir quejas que se presenten de forma anónima, infundada o con mala fe. No es juez, ni tiene poder ejecutivo sobre las administraciones públicas. Por tanto, no dicta setencias, no impone sanciones, ni puede suspender las actuaciones administrativas objeto de queja.
El informe del Diputado del Común
Además de la investigación y resolución de las quejas presentadas por los ciudadanos, el Diputado del Común informa al Parlamento de Canarias sobre su actividad anual en un informe que presenta ante el Pleno de la Cámara autonómica. En ese documento recoge las quejas recibidas, las actuaciones que ha emprendido para su resolución, la respuesta que han obtenido de las administraciones públicas y las medidas sugeridas. El Común tiene relación además con otras instituciones que desempeñan el mismo papel en otras comunidades, como puede ser el Defensor del Pueblo Andaluz. Además, puede elaborar informes extraordinarios referidos a asuntos de especial gravedad o trascendencia.
