viernes. 29.03.2024

Ha sido fundamental la acción conjunta de la Guardia Civil y la Brigada de Investigación de Incendios Forestales del Cabildo

Componentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil y los agentes de Medio Ambiente de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF) del Cabildo de Gran Canaria han logrado esclarecer una oleada de incendios y conatos que habían afectado a la zona del Campus Universitario de Tafira, en Las Palmas de Gran Canaria, desde el año 2010, a escasos metros de una zona de alto riesgo forestal.

Inicio de la investigación

Los agentes de la BIIF entregaron a la Guardia Civil, según explica este mates en nota de prensa el instituto Armado, un atestado e informe técnico en el que recopilaban una serie de datos procedentes de sus investigaciones que apuntaban a la autoría de una sola persona como autor de 14 incidencias, entre conatos e incendios, producidos en las inmediaciones del referido Campus Universitario, momento en el que el Seprona inició sus pesquisas, el pasado 10 de enero.

Modus operandi

Los agentes del BIIF determinaron que todas esas incidencias presentaban un patrón común, en este caso el simple amontonamiento de residuos secos con una posterior aplicación de un líquido, o elemento químico, para propagar rápidamente el fuego.

El más grave de esos incendios se produjo el 01 de mayo del 2013, en la zona de La Palmita (se adjunta fotografía), próxima al citado Campus, donde resultó quemada una superficie de 626 metros cuadrados, que afectó a vegetación diversa como palmeras canarias, pitas y tuneras, dañando de esa extensión 155 metros cuadrados clasificados como suelo Rústico de Protección Paisajística, con el peligro añadido de la cercanía del Jardín Botánico Viera y Clavijo, en el Barranco de Guiniguada.

La propagación de cualquiera de sus fuegos, algunos a apenas 150 metros del Guiniguada, podía afectar a personas y viviendas, lo que se suma al potencial de propagación del barranco hacia el suroeste y oeste, máxime si se produce en condiciones de calor, sequedad y viento.

La superficie potencial de un incendio en este barranco supera las 15.000 hectáreas e involucra a los municipios de Las Palmas de Gran Canaria, Santa Brígida, San Mateo y Teror, así como a los espacios protegidos de Pino Santo, Tafira, Parque Rural de Doramas y Paisaje Protegido de Cumbres, por lo que la identificación del autor de estos fuegos era primordial.

Investigación por delitos de incendio forestal y daños

Como consecuencia del trabajo desplegado por la BIIF y de la recopilación de una serie de manifestaciones de testigos, los agentes del SEPRONA pudieron averiguar la presunta autoría de los incendios analizados, produciéndose la investigación, el pasado día 17, de una persona de nacionalidad española y 80 años de edad, como supuesto autor de un delito de incendio forestal y otro de daños.

Los delitos de incendios forestales, regulados desde el artículo 352 al 355 del Código Penal (Ley Orgánica 1/2015, de 30 de marzo), prevén tanto penas de prisión como sanciones de multa para este tipo de delitos.

El investigado, junto a los informes y las diligencias originadas por las pesquisas, ha quedado a disposición del correspondiente Juzgado, en funciones de Guardia, de Las Palmas de Gran Canaria, remitiéndose además copia a la Fiscalía de Medio Ambiente de Las Palmas.

La Guardia Civil y el Cabildo esclarecen una oleada de incendios en Gran Canaria
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