Esta semana le vimos en la reinauguración de la Estación de Guaguas de Playa Blanca. ¿Vuelve usted a la actividad?
Todavía sigo siendo concejal, aunque en la oposición, y es mi deber asistir a los actos oficiales del Ayuntamiento. Fue invitado como el resto de los compañeros a la inauguración de la estación. Me alegro mucho de que se haya puesto en marcha, porque ya son muchos años los que llevamos trabajando en el proyecto. La estación estaba preparada desde hace muchísimo tiempo.
Estos días la consejera de Política Territorial, Manuela Armas, dijo que buscaría soluciones al asunto de los hoteles irregulares. Asegura que analizará uno por uno todos los casos de los hoteles de Yaiza y todas las sentencias al respecto de los mismos. Por otra parte, Domingo Berriel dice que ya no incluirá Lanzarote en la Ley de Medidas Urgentes. Y a todo esto, los alcaldes de Yaiza y Teguise protestando por este asunto.
Creo que debe haber una solución para todos por igual, no a unos sí y a otros no, como se ha hecho hasta ahora. Hasta ahora se ha llegado a acuerdos con otras empresas. Ha habido partidismo en este aspecto. Allí está la actitud del Gobierno de Canarias, que se ha dado cuenta que el Cabildo no camina hacia delante ni ha tenido voluntad en ningún momento de arreglar nada. Su política es montar es un cirio por defectos de forma y hacer gastar un montón de dinero al Ayuntamiento y al propio Cabildo. Alguien se estará aprovechando de todo esto y por eso lo han hecho.
Pero dicen que no son defectos de forma, sino defectos formales, legales.
Los hoteles están hechos en parcelas hoteleras. Los apartamentos están hechos en parcelas para tal fin. ¿Qué no estaban todas las ordenanzas publicadas? Pues ya lo están. También dicen que faltaban informes de sostenibilidad. Pues eso son defectos de forma. No es que se hayan construido en zonas verdes o en espacios públicos. Y esto es lo que han utilizado políticamente, haciéndose ver como los únicos defensores de Lanzarote, los únicos que aman Lanzarote. Creo que llevan mucho tiempo confundiendo Lanzarote con Arrecife y poco más. Parece que Yaiza no pertenece a Lanzarote. Prueba de ello es que ahora ya no estoy en la alcaldía, ahora hay otras personas, y sigue el Cabildo enfrentado con el Ayuntamiento de Yaiza. No es la institución en sí, sino otra cosa.
¿Cree que detrás de todo este asunto hay negociaciones o acuerdos algo extraños?
No es que los haya, es que han existido. Y han salido a la luz, como en el caso de Algol o Yudaya. Y allí estaban los mismos defectos de forma. En definitiva todos tienen que ser tratados por igual. No creo que la presidenta del Cabildo tenga ningún interés en no solventar este tema. Hay otros personajes que son los que marcan las pautas y no quieren que el problema se arregle, ni quieren que el Gobierno de Canarias meta baza, porque quieren arreglarlo ellos, y de uno en uno.
Y ahora que está en la oposición, y prácticamente en el retiro, cómo se ven los toros desde la barrera.
Pues estoy muy tranquilo. Y lo siento por los compañeros que siempre han estado allí, al pié del cañón y dando el callo. Yo ahora me encuentro muy cómodo y muy bien. Como quién dice, otros vendrán y bueno me harán.
¿Echa de menos la alcaldía?
Para nada. Yo egoístamente estoy disfrutando de la familia y arreglando mis problemas que tenía muy abandonados. Ya estuve 20 años intentando arreglar los problemas de los demás, y ahora es el turno de los míos.
¿Cree que al final se arreglará todo este potaje con los hoteles?
Creo que si no se arregla es porque a alguien le interesa que sea así. Si estudiamos a fondo toda la trayectoria del PIOT y de todas las modificaciones que se han hecho con la ordenación territorial vemos que todo se hizo para fastidiar exclusivamente este municipio. Y es así desde hace muchos años. El gran enemigo público de Yaiza ha sido el Cabildo y lo sigue siendo. No sé si es porque el PSOE nunca ha podido ganar las elecciones en Yaiza. Yo ya no estoy, pero los problemas siguen. Quiere decir que no sólo yo era el obstáculo.
