- De Armas se ha mostrado muy satisfecho con el trabajo realizado por el equipo redactor de la empresa pública, y ha afirmado que será el próximo grupo de gobierno del Ayuntamiento el encargado de realizar los informes pertinentes para la aprobación inicial de este plan
- Desde el Ayuntamiento de Arrecife se espera que, una vez aprobado
definitivamente este plan especial, se firme el decreto anulando el Bien
de Interés Cultural (BIC) que en esto momentos pesa sobre el Charco de San Ginés y toda su zona de influencia
- “Se trata de un instrumento normativo que nos permite saber qué es lo que podemos hacer en esta zona de la capital, es decir, las alturas
permitidas, los colores o el tipo de edificación”, ha explicado el
concejal de Urbanismo
- Los BIC, los Bienes Catalogados y las infraestructuras, donde se incluyen los aparcamientos públicos, las carreteras, así como el alumbrado y las instalaciones de energía eléctrica y telefonía, además del mobiliario urbano, las fachadas, los colores y la carpintería, son otros aspectos de los que se ocupa en profundidad este plan
El director gerente de la empresa pública Gestión y Planeamiento
Territorial y Medioambiental (Gesplán), Rafael Castellano, entregó este miércoles al
concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Arrecife, Pedro de Armas, el
Plan Especial de Ordenación del Centro Histórico y Charco de San Ginés
para su tramitación. El documento encargado por la corporación capitalina
a esta empresa tiene como objetivo conservar y mejorar el paisaje urbano,
así como proteger los valores patrimoniales de esta emblemática zona de la
capital.
De Armas, que se mostró muy satisfecho con el trabajo realizado por el
equipo redactor de Gesplán, afirmó que será el próximo grupo de gobierno
del Ayuntamiento de Arrecife que se constituya tras los comicios del 22 de
mayo el encargado de realizar los informes pertinentes para la aprobación
inicial de este plan por parte del pleno de la corporación. El edil
recordó que con este importante documento se pretendía resolver los
impactos ambientales que contribuyen “a la desvalorización de la imagen
del Casco Histórico y Charco de San Ginés, además de conservar y mejorar
los recursos naturales del Charco de San Ginés, considerando el paisaje
del entorno como un activo a proteger”.
Del mismo modo, añadió que con este plan se “dinamizan vacíos, a la vez
que se activan y diseñan espacios sin uso determinado”, mejorando y
adecuando las redes de infraestructuras y servicios públicos a las
necesidades de la población residente y a los nuevos usos a desarrollar.
Las actividades comerciales, recreativas y de ocio compatibles con la
preservación del carácter tradicional del Charco de San Ginés, junto a la
propiciación de hitos arquitectónicos y artísticos de referencia, y a la
potenciación de la identidad marinera del Centro Histórico y Charco de San
Ginés en el contexto insular como núcleo cultural y turístico, son otros
de los aspectos que regula este plan.
Tal y como ha explicado De Armas, se trata de “un instrumento normativo
que nos permite saber qué es lo que podemos hacer en esta zona de la
capital, es decir, las alturas permitidas, los colores o el tipo de
edificación”. “En definitiva, hemos querido ordenar definitivamente esta
importante zona de la capital de la Isla”, puntualizó el edil capitalino.
Desde el Ayuntamiento de Arrecife se espera que, una vez aprobado
definitivamente este plan especial, se firme el decreto anulando el Bien
de Interés Cultural (BIC) que en esto momentos pesa sobre el Charco de San
Ginés y toda su zona de influencia. Como se recordará, la totalidad de los
grupos políticos del consistorio capitalino se ha pronunciado hasta en dos
ocasiones en contra de la catalogación como BIC del Charco por considerar
que el área protegida era “excesiva”.
Usos y normativa edificatoria
Según la memoria del Plan Especial de Ordenación del Centro Histórico y
Charco de San Ginés, el plan nace desde el convencimiento de que el área
que comprende tiene “un enorme potencial sin explotar, y con el afán de
salvaguardia e impulso de sus capacidades y de la necesidad de dar
respuesta a un área necesitada de cambios y de un futuro de actividad y
calidad”.
Para ello, este instrumento normativo establece la ordenación
pormenorizada y el diseño de las medidas tendentes a la protección de su
patrimonio arquitectónico y etnográfico, y a la revitalización del entorno
como punto de atracción cultural, comercial y turística. En este sentido,
contempla la ordenación de la ribera del Charco de San Ginés, el barrio de
El Lomo, la calle León y Castillo, o las Cuatro Esquinas, entre otros.
El Plan Especial de Ordenación del Centro Histórico y Charco de San Ginés
delimita además, dentro del ámbito establecido, los espacios libres
públicos como la ribera del Charco, la plaza de Las Palmas, o las áreas
ajardinadas, estableciendo los diferentes usos permitidos y prohibidos.
Los Bienes de Interés Cultural (BIC), los Bienes Catalogados y las
infraestructuras, donde se incluyen los aparcamientos públicos, las
carreteras, así como el alumbrado y las instalaciones de energía eléctrica
y telefonía, además del mobiliario urbano, las fachadas, los colores y la
carpintería, son otros aspectos de los que se ocupa en profundidad este
plan.
40 viviendas protegidas
El Plan Especial de Ordenación del Centro Histórico y Charco de San Ginés
protege un total de 40 edificaciones en toda esta zona. Así, se preserva
la iglesia de San Ginés, el Casa de los Arroyo, la Casa Parroquial de San
Ginés, varios inmuebles de la calle Otilia Díaz, otra edificación de la
calle San Ginés, además de La Recova, la Biblioteca Católica, la librería
de San Ginés y un inmueble en la calle Aquilino Fernández y Ginés de la
Hoz.
También aparecen en este Catálogo de Viviendas Protegidas dependencias de
la Primera Institución de Lanzarote, el edificio donde se ubica la oficina
técnica del Ayuntamiento de Arrecife, el antiguo Bar Janubio, así como la
primera sede del Cabildo insular. Otros inmuebles protegidos son algunos
comercios situados en la calle Real o zonas muy significativas del entorno
del Charco como la calle El Aguaresío o la plaza de Las Palmas.
Por su parte, para las viviendas de la zona que no forman parte de este
Catálogo, el plan contempla la protección de las edificaciones con valores
arquitectónicos, pero también la posibilidad de renovación o sustitución
de la edificación que lo requiera. En este sentido, establece la normativa
edificatoria para cada zona del entono del Casco Histórico y Charco de San
Ginés, explicando detalladamente las pautas fijadas para la conservación,
restauración, consolidación y rehabilitación, así como la protección o,
por el contrario, la declaración legal de ruina.