viernes. 29.03.2024

La sal (julio 2007), El color (julio 2008), El viento (julio 2009) y La arena (julio 2010) serán los temas principales sobre los que girarán las próximas ediciones del Congreso Internacional de Arquitectura, que se celebró por primera vez en Lanzarote entre los días 24 y 28 de julio, en el Arrecife Gran Hotel, reuniendo a alrededor de 58 participantes, entre alumnos y oyentes.

Así, con la clausura del I Congreso Internacional de Arquitectura La sombra en el desierto concluye tan sólo una primera parte del proyecto con el que se intenta poner sobre la mesa ideas que aborden, desde la arquitectura, el entorno, la ciudad y el territorio de la Isla, dirigiendo nuevas miradas con la intención de repensar los espacios de Lanzarote.

Desde la inauguración del Congreso se conformaron tres equipos de alumnos dirigidos por Manuel Gausa, Federico Soriano y José Morales, que iniciaron visitas, tanto a los espacios más turísticos de la Isla, como Timanfaya, Playa Blanca o el Mirador del Río, como a zonas más concretas, como Famara, las diferentes salinas, La Graciosa, Arrecife, Teguise o El Golfo, siempre a la búsqueda de localizaciones sobre las que actuar, detectando que las soluciones pasan por considerar a Lanzarote en su totalidad.

El grupo dirigido por Manuel Gausa trabajó, por ejemplo, en dos lugares contrastados: en Arrecife como núcleo urbano y en Timanfaya como espacio natural. Sus propuestas se basan en darle un sentido lúdico a las intervenciones y en activar el paisaje desde su manipulación directa, haciéndolo interactivo.

Federico Soriano, por su parte, dirigió sus alumnos hacia la elaboración de un catálogo de sombras, a modo de manual. Empezar un problema desde la escala menor, como puede ser clasificar el modo de conseguir espacios de sombra en Lanzarote, puede dar como resultado todo un mundo de posibilidades.

El taller de José Morales, por último, se ocupó de la Isla en su conjunto obviando los principales espacios destinados al turista. Analizaron Lanzarote como un cuerpo vivo a partir de la materia propia. Desde la geología hasta la flora, intentaron descubrir estructuras formales para desde su interacción proponer relaciones concretas con el lugar.

La creatividad, la innovación y el afán por evitar el consumo irracional del espacio, proponiendo una reutilización de lo ya construido, son conclusiones comunes a los tres directores del Congreso. Los resultados de los distintos grupos se expusieron el viernes, 28 de julio y se completarán con una publicación que verá la luz el próximo mes de noviembre.

Asimismo, el taller de proyectos del Congreso servirá para ir avanzando en un texto abierto entre los distintos campos del conocimiento y la creación que engloba la arquitectura, con esa carga de imaginación y pragmatismo que ya durante estos días han mostrado los directores, a través de proyectos propios, así como de sus percepciones sobre los espacios.

Con la firme voluntad de continuar esta trayectoria, que ya anunció el consejero de Educación y Cultura del Cabildo en la inauguración del Congreso, se ha preparado un cartel con los temas a abordar a partir del próximo año y hasta el 2010, siguiendo esa tendencia que ha marcado este primer encuentro, desde la sombra, como una sugerencia de un espacio colectivo habitable, con la idea de crear lugares con más vida comunitaria.

Conviene resaltar que las valoraciones y propuestas de los alumnos serán recogidas en un libro-guía, que se convertirá en un material de obligada referencia para seguir trabajando en la consecución de una arquitectura razonada, inteligente y avanzada.

Finaliza con éxito la primera edición del Congreso Internacional de Arquitectura
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