La celebración de la función religiosa presidida por el párroco de Yaiza, Sixto Álvarez, en la ermita de Femés, antecedió a la peregrinación de los fieles que honraron este domingo a Nuestra Señora del Rosario. Vecinos y visitantes se concentraron en la Casona de Femés, alrededor de las 17:00 horas, para participar de la Eucaristía y luego caminar, junto a la imagen de la virgen, por las calles aledañas al templo. La parranda Janubio hizo el acompañamiento musical tanto en la misa como en la romería.
Una vez concluida la función religiosa, en la que el cura recordó que la veneración a la imagen de la advocación mariana de la virgen del Rosario tiene que estar ligada al comportamiento diario de los creyentes, decenas de ellos se reunieron en la puerta de la ermita para iniciar la procesión con absoluto respeto. En el corto recorrido pudo verse gente de todas las edades siguiendo el ritmo de la parranda, muchos ataviados con trajes típicos canarios, mientras que otros saludaban desde las terrazas de sus viviendas el paso del desfile. Los romeros llegaron nuevamente hasta la puerta de la iglesia para unirse al homenaje que en forma de música ofreció la parranda Janubio.
La fiesta continuó en la carpa dispuesta en la plaza del pueblo con la actuación de la parranda Salineros de la Hoya. Vecinos de Femés cantaron, bailaron y compartieron vino y queso de la tierra para de esta forma concluir los tres días de celebraciones en honor a la virgen del Rosario. Las fiestas dejaron buen sabor de boca ya no solo por el disfrute de los vecinos, sino además por la muestra de hermandad del pueblo de Femés que se volcó con el mercado solidario para ayudar a los residentes más necesitados de Yaiza.
