El que fuera presidente del Cabildo de Lanzarote y alcalde de Arrecife, Enrique Pérez Parrilla, inauguró en la tarde de este jueves las fiestas de San Ginés 2014 con un emotivo pregón en el que relató su relación con su ciudad natal.
Sus palabras, entre irónicas y nostálgicas, mostraron un pasado feliz de niño, tamizado por la mirada adulta que reconoce que el Arrecife idílico de su memoria «era una ciudad sin agua corriente, con chiqueros en su interior y enjambres de moscas, en la que los niños fallecían por simples diarreas».
“Con las ciudades en las que uno nace y vive su infancia se entabla una relación materno-filial. Como a las madres, se las quiere y se las defiende, sin entrar en otras consideraciones”, destacó, tal y como refleja la nota de prensa remitida este viernes por Arrecife a este diario.
Los juegos en la calle o en los llanos, en los charcos y la marea baja, forman parte de ese grato recuerdo de Pérez Parrilla, como de todos los arrecifeños de su generación. Pero tal y como apuntó, “es cierto que la historia la escriben los supervivientes y todos los pregoneros lo somos. Si pudieran escribirla quienes se quedaron en el camino, o se fueron en busca de mejores horizontes, escribirían cosas muy distintas”.
Respecto a las fiestas patronales, el exalcalde de Arrecife recordó que durante su infancia y juventud, pese a que las fiestas se celebraban en su honor, San Ginés permaneció encerrado en su iglesia, “pues en aquel periodo de nacional-catolicismo, rezar al santo y divertirse eran incompatibles”.
Pérez Parrilla aprovechó la tribuna municipal para advertir del riesgo de la explotación de hidrocarburos frente a la costa de Lanzarote, «una amenaza no solo para el medio marino sino también para nuestro modelo económico basado en el turismo».
El pregonero se despidió señalando que “Arrecife ha sido siempre una ciudad que ha dado a Lanzarote más de lo que ha recibido y sobre la que se han acumulado todos los problemas generados por un crecimiento desbordado. El futuro de la isla es esperanzador pero para ello será necesario, nuevamente, que desde Arrecife se mantenga la resistencia a la que la capitalidad nos compromete y el futuro nos exige”.
El alcalde de Arrecife y anfitrión del acto, Manuel Fajardo, dio una cálida bienvenida a Enrique Pérez Parrilla, destacó su faceta de ciudadano y señaló que, además de haber compartido apasionantes debates públicos y privados y haberse relacionado como profesor y alumno, «nos une el amor por esta ciudad y el convencimiento de que otro Arrecife es posible».
El concejal de Fiestas, Víctor Sanginés, realizó un extenso recorrido por la trayectoria académica y pública del pregonero, destacando su firme compromiso con las libertades y los logros políticos por los que pasará a la historia, «la aprobación del primer Plan Insular de Ordenación del Territorio de Canarias, en Lanzarote, y la instalación en la conciencia colectiva de conceptos como sostenibilidad del desarrollo, capacidad de carga o control del crecimiento».
