viernes. 29.03.2024

Ya lo decía el ilustre Asterix cuando a Cesar se le ocurría enviar a sus legiones para intentar invadir su poblado, “están locos estos romanos”.

En pleno siglo XXI han aparecido una suerte de romanos que han creído conveniente conquistar las mentes ciudadanas de la misma forma que Cesar intento invadir la Galia de Asterix, mediante el engaño y tácticas que no convencen ni al que las diseña.

Lo que les pasa a nuestros políticos ¿es una enajenación mental transitoria o una patología medica permanente aun por determinar?.

Pedro suscribe un pacto con Alberto, por aquello de que ahora ya no son Ciutatans sino Ciudadanos, que deja fuera a Mariano y a Pablo. Pero no contento con eso, pretende que, Pablo le apoye alegando eso tan absurdo de “si no permite que yo gobierne es porque esta a favor de que siga Mariano y sus políticas antisociales”.

Por su parte, Alberto intenta que Mariano le apoye en ese pacto por una razón muy simple, sin Mariano los acuerdos más importantes que contempla dicho pacto, los referentes a las modificaciones constitucionales, son inviables.

Pablo por otro lado, afirma y con toda la razón del mundo, que como va a apoyar un gobierno en el que el no es vicepresidente y sus huestes ministros y además esta sustentado por los yogurines del PP.

Mariano, en el pleno ejercicio de sus “facultades mentales” le niega el pan y la sal ya que, con la misma o parecida lógica que sustenta el argumento de Pablo, como va a apoyar un pacto que se fundamente en la eliminación, derogación, supresión o como quieran ustedes denominarlo, de las leyes que han aprobado durante sus cuatro años de rodillo parlamentario.

¿Es o no es para mandar a los cuatro a un especialista?

Ante esta Kafkaiana situación, el ciudadano se pregunta lo mismo que Asterix, ¿están locos estos romanos?

La obsesión de Pedro por dormir en la alcoba de la Moncloa le lleva a plantear escenarios políticos más propios de una nueva entrega de Torrente que de una realidad sustentada en planteamientos racionales.

No es posible sorber y soplar al mismo tiempo. No se puede estar en misa y replicando y esto es lo que pretende la irracionalidad política de Pedro.

Si pactas con Alberto dejas fuera a Pablo. Esto no es nuevo, durante toda la campaña y lo que llevamos de legislatura a todos se les ha llenado la boca diciendo una cosa y la contraria. Entonces, sabiendo la opinión que tiene Pablo de las políticas conservadoras de Alberto, del que ha afirmado por activa y por pasiva que es la marca blanca del PP nacida al amparo del IBEX 35 y forjado a fuego lento en la cocina de FAES, ¿a que viene firmar con el segundo sabiendo que el rechazo del primero seria fulminante?.

Yo tengo la siguiente teoría y que vengo manteniendo desde el 21 de Diciembre.

Pedro sabe que no puede pactar con Pablo porque se lo comería crudo. Sabe que tener a los de Podemos sentados en el consejo de ministros seria como si un medico te receta un jarabe de Mamba Negra para curar un catarro. Pablo con mando en plaza no solo dirigiría sus ministerios sino que controlaría los de Pedro. Además de otras consideraciones puramente políticas, el peligro de Pablo como vicepresidente seria algo que ninguno podría controlar.

Pedro, eso es así y lo sabes.

Con este pacto, pone contra las cuerdas, al menos eso piensa Pedro, a Pablo, le esta diciendo y además públicamente, que o con el o con Mariano, lo cual, para una mente medianamente amueblada es una soberana estupidez. Intentar hacer creer al ciudadano que si Pablo no apoya el pacto es porque esta a favor de que continúe Mariano es solamente fruto de una mente, políticamente, enajenada.

Por su parte, el bueno de Alberto le dice a Mariano que para que este pacto pueda ser factible tiene que apoyarlo. Y Mariano, con toda la razón del mundo, le contesta que como va a apoyar un pacto que se ha redactado sin su concurso, que pone de presidente a quien le ha ofendido indecentemente y en publico, al que le ha sacado muchos cientos de miles de votos y que, como colofón, solo busca lo que he dicho anteriormente, la derogación de muchas de sus leyes, la supresión de las diputaciones provinciales y muchas otras medidas contrarias radicalmente a sus planteamientos políticos.

No voy a ser yo quien de la razón o se la quite a estos cuatro actores de vodevil, pero lo que si tengo claro es que la falta de altura política que tienen todos puede llevar a España a un camino de difícil retorno.

Creo firmemente que lo único que están haciendo es anticipar el discurso preelectoral ya que si el apoyo de Mariano al pacto tal y como esta planteado no es posible, el apoyo de Pablo seria irracional.

Pero todo es posible. No tengo ni la razón ni la verdad absoluta así que podría ser que, o bien a Mariano de diera un ictus repentino y con tal de eliminar a Pablo del panorama político, decidiera que lo menos malo es que Pedro duerma en su cama o bien que a Pablo se le cruce la neurona y con tal de que Mariano vuelva al Registro de Alicante, permita que Pedro le niegue la mayor y gobierne a pesar de que no habría referendums, ni derogación de la reforma laboral, ni otras medidas económicas imprescindibles para un gobierno progresista, reformista, podemista y otros istas que sustentan su filosofía izquierdista.

¿A que esto es un follon?

Yo, visto lo visto, me quedo con Asterix y sus visionarias palabras.

Enajenación mental, ¿transitoria?
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