Fotos: Dory Hernández
No interesa que la Isla se desarrolle. Ésta es la postura de las organizaciones empresariales de Lanzarote, que firmaron este viernes una declaración mediante la cual pretenden que la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPG) y la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias desbloqueen la situación de la Escuela de Empresariales de Arrecife.
Los 43 alumnos matriculados en el centro no han podido iniciar su actividad, debido a que el centro aún no ha recibido la autorización del Gobierno de Canarias que, a su vez, depende de un informe favorable de la Universidad de Las Palmas.
Por ello, diversas organizaciones empresariales de la Isla (Asolan, Felapyme, la Asociación de la Construcción, la Confederación de empresarios y Femelan) han mostrado su apoyo a la Escuela de Estudios Empresariales, ya que consideran que la Isla adolece de profesionales formados en el sector empresarial. Además, justifican la necesidad de que el centro inicie con prontitud su actividad en el hecho de que existen muchos alumnos en Lanzarote cuyas familias no pueden costear que sus hijos vayan a estudiar a Gran Canaria. Una situación que los empresarios ven como freno a la mayoría de edad de Lanzarote.
El portavoz de la Escuela, José González, considera que la situación es injusta. El informe de la Universidad de Las Palmas precisa que la Escuela de Estudios Empresariales no cuenta con el número mínimo de alumnos (35) para que la diplomatura se ponga en marcha y que la contratación del personal docente no se ha hecho de acuerdo con los principios de libre concurrencia que estipula la ley. No obstante, estos problemas parecen estar resueltos, puesto que los alumnos matriculados en la actualidad superan en el cupo mínimo establecido y los profesores cuentan con la formación necesaria para impartir clases.
