martes. 16.04.2024

1.- Era lógico. Las bases de Coalición Canaria hicieron la siguiente reflexión. Si CC es un partido serio, es decir, que vive también de la buena prensa, ¿cómo va a meter en las listas al Congreso o al Senado al niño Ríos , primer responsable de la mierda de concurso de emisoras de FM? ¿Con qué cara iba a ir Fernando Ríos a las radios, cuyos propietarios se quedaron mirando al cielo, a hacer apología electoral del partido? Parece que el más virulento opositor al niño Ríos fue Ricardo Melchior , quien por una vez puso los huevos sobre la mesa y dijo: "Este tío, no". Y el niño Ríos se quedó fuera y tuvieron que tirar de Milagros Luis Brito , que había sido desterrada a Deportes y que allí duró lo que un merengue en la puerta del Montesori. Por otra parte, las mismas bases, y atención que lo digo con conocimiento de causa, están a punto de dar un tirón de orejas al presidente Rivero y a su querida esposa. La misma que me acusa a mí de haber orquestado una campaña contra ella en la noche de los tiempos. Algo que me parece de lo más estúpido porque no sólo no hubo campaña -y sí información- sino que creí que el asunto había quedado zanjado hacía tiempo. Y va y la muy toleta lo dice en la Televisión Autonómica, ante la cara de estupor de Carmelo Rivero .

2.- El tirón de orejas se producirá tras la siguiente disquisición de algunos cargos del partido. Paulino no tenía que haber cometido tan tremendo fallo (el del concurso chimbo de las emisoras de FM), que no le afecta sólo a él, sino a toda CC. Las críticas que recibe Rivero, algunas muy virulentas, de los afectados repercuten ya no sólo contra él sino contra la organización. Rivero no puede hipotecar a su partido para defenderse él de un asunto personal (lo de México). Y le van a decir que ya está bien. Y que tampoco utilice un medio público para mandar a su mujer a decir paridas. Porque Ángela Mena últimamente no dice sino gilipolladas.

3.- Esta Evita Perón de nuevo cuño hace un flaco favor a su marido. La política en Canarias es muy dura, más que en cualquier otra parte. Se hace realidad aquello de que pueblo chico, infierno grande. Si uno mete la pata -como la metió el Gobierno (la mesa de evaluación cuyos componentes el Gobierno nombró) con lo de las FM- debería ser más humilde, más rápido de reflejos, más ágil. Aquellos polvos, pues, trajeron estos lodos. Y la gente está cabreada. Y lo mismo que se pueden cargar las bases al niño Ríos -defenestrado ya para los restos- podría ocurrir con Paulino, si él solito -con la inestimable colaboración de Mena- hipoteca el futuro de Coalición Canaria. Cuidadín, cuidadín, que los cargos no son eternos, ni ese partido tiene un solo dueño. Sino muchos dueños. La discrepancia, al menos, está ahí. Porque el Principado de Augusto se acabó en los tiempos de los romanos. Los poderes omnímodos no caben en estos días. Ay.

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El niño Ríos, fuera
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