El Partido Socialista y el Partido Independiente de Lanzarote (PIL) están nuevamente de reparto. Tras la cascada de dimisiones que se han producido a lo largo del pasado mes de marzo, el grupo de gobierno precisa de una reestructuración en profundidad. Tres concejales han dejado sus actas. Los socialistas Marcos Bergaz y Miguel Ángel Ferrer, dejando desiertos los departamentos de Festejos, Cultura y Turismo, y el insularista Antonio Hernández, que dejó libres las áreas de Urbanismo y Policía Local, además del cargo de primer teniente de alcalde.
Esta tarde estas áreas volverán a tener un responsable, aunque de momento no queda muy claro cómo quedará el nuevo organigrama del Ayuntamiento. Lo que sí parece decidido es la división del departamento de Urbanismo en dos parcelas distintas, separando el Plan General del resto. Las quinielas apuntan a que el PGOU será asumido por el que también será el nuevo primer teniente de alcalde, el insularista Ubaldo Becerra. El área de Urbanismo propiamente dicho también quedará presumiblemente en manos del PIL. Las apuestas se hacen sobre el actual concejal de Economía y Hacienda, José Miguel Rodríguez, del que se dice que aceptará si le dejan conservar el departamento que dirige en la actualidad.
Por otra parte, parece ser que el PIL quiere deshacerse de la Policía Local y quedarse con Festejos.
Lo que sigue siendo un misterio son las áreas que asumirán los dos nuevos concejales de gobierno que tomaron posesión en el pleno municipal celebrado la semana pasada. En declaraciones a Crónicas al término de la sesión plenaria, el socialista Alberto Morales expresaba su preferencia por el departamento que dirigía su compañero dimitido, Marcos Bergaz. Por su parte, el insularista Ángel Eduardo Lasso, que ocupa el puesto que quedó vacante tras la dimisión de Antonio Hernández, ocupará probablemente algún cargo de menor relevancia.
