FOTOS: DORY HERNÁNDEZ
El presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, se comprometió este martes en el centro sociocultural de Caleta de Sebo, en La Graciosa, a modificar el Plan rector de uso y gestión (Prug) del Archipiélago chinijo, tal y como le solicitaron los vecinos.
El presidente del Gobierno canario se reunió con más de un centenar de vecinos que le plantearon las demandas más urgentes para la Isla. Rivero señaló su intención de agilizar la aprobación de los estatutos del Consorcio del Parque Natural del Archipiélago chinijo para después modificar de manera considerable el Prug.
Los vecinos consideran que ese plan se ha quedado obsoleto y que ya no responde a las necesidades actuales y creen que hay que permitir otras actividades económicas en la Isla, preservando el medio ambiente.
Los vecinos están asociados en un Consejo de ciudadanía y forman parte de ese consorcio, en el que están las administraciones locales, insulares, regionales, y nacionales. Uno de los vecinos, Ginés Díaz, solicitó modificar ese plan para dar cabida a la incorporación de la mujer al trabajo, una vez que la pesca ha perdido su protagonismo. Solicitó el compromiso de Rivero para iniciar ya el análisis previo a la modificación del plan, a lo que éste accedió.
Sin tasas portuarias
Otro de los compromisos de Rivero con La Graciosa fue el de eliminar para el año que viene las tasas portuarias del G4 a los barcos con sede en Caleta de Sebo, lo que puede suponer un ahorro, en algunos casos, de más de 2.000 euros al año a algunos barcos.
En materia de pesca, los vecinos solicitaron que se agilicen algunos trámites, que se deje pescar con permisos provisionales o que se permita el marisqueo y el pulpeo a los profesionales, entre otras reivindicaciones.
El presidente del Gobierno estuvo acompañado en su vista a La Graciosa por el consejero de política territorial, Domingo Berriel, el viceconsejero de pesca, Juan Francisco López y el Director general de Puertos, Juan Manuel Soto. Éste último señaló que los servicios del varadero serán gestionados directamente por la Cofradía de pescadores.
Por último, uno de los portavoces de los vecinos, Miguel Páez, señaló que La Graciosa quiere dejar de ser la anécdota de Canarias.”Estamos hartos de ser lo simpático y no queremos ser diferentes”, señaló, y aseguro que los vecinos aspiran en un futuro a reivindicaciones mucho mayores. “Aspiramos a ser una isla más dentro de Canarias, que seamos ocho y no siete”.
