AGENCIAS
Este encuentro ha cerrado la ronda de reuniones que Rodríguez Zapatero ha mantenido con los representantes de todos los grupos parlamentarios tras el anuncio del alto el fuego permanente de ETA.
Moraleda expresó la "satisfacción" del Gobierno por el "apoyo unánime" logrado y resaltó la "responsabilidad" dada en consecuencia al Ejecutivo.
Consideró que el apoyo de las fuerzas políticas es un "síntoma" de las "nuevas actitudes" que se observan en este momento, y por ello destacó que "podemos constatar que hay motivos para la esperanza".
Sin embargo, el secretario de Estado de Comunicación dijo desconocer si el presidente del Gobierno había recibido un nuevo informe de las fuerzas de seguridad sobre el abandono de la violencia por parte de ETA. "No me consta que el presidente tenga en su mesa el informe policial", afirmó.
Acercamiento de presos
Tras dos horas de encuentro con Rodríguez Zapatero, Imaz se mostró partidario de una política penitenciaria flexible, consensuada y dinámica que acompañe al proceso de paz, tal y como hizo, dijo, "el Gobierno de Aznar en septiembre de 1998, a las seis semanas del alto el fuego de ETA".
A la pregunta de si considera conveniente que el Congreso adopte una resolución similar sobre el acercamiento de presos, Imaz dijo que "la clave es el acuerdo político" porque el "marco jurídico-constitucional permite perchas legales y elementos que pueden dar en determinado momento cauce a un acuerdo político, en los términos que el PNV plantea".
Imaz insistió en que "no puede haber ningún proyecto político que sea condición 'sine qua non' para consolidar la paz" y subrayó que "los acuerdos políticos no son consecuencia ni están vinculados a un proceso de paz" y éste es "un elemento de higiene democrática que el PNV siempre va a defender".
También apostó porque el PP esté presente en el futuro diálogo multipartito que se lleve a cabo en el País Vasco y consideró que "a medida que la violencia vaya desapareciendo del paisaje, determinadas situaciones que hoy nos cuesta comprender van a ser posibles".
Hizo hincapié en que el PNV "se empeñará" en que todas las sensibilidades estén presentes en ese foro multipartito, también los populares, a quienes pidió "que bajen de las posiciones que ocupan en el monte político".
Para el PNV, la clave de una solución en el futuro está basada en el binomio de "no imponer, no impedir". Así, Imaz explicó que se trata de "no imponer en Euskadi mayorías políticas que no cuenten con una adhesión inferior a la que tuvo el Estatuto de Guernica en su momento" y, a su vez, "no impedir que los acuerdos políticos puedan tener su traslado al marco jurídico-político a través de un acuerdo de las instituciones del Estado".
Imaz recordó que "estamos en la fase de verificar el alto el fuego" y anunció que "en un par de semanas tendremos la fotografía completa de cuál ha sido el avance en torno a esta cuestión y hay datos que apuntan a un evidente optimismo".
