sábado. 20.04.2024

Por Ignacio González Santiago

LA COALICIÓN electoral que suscribió CC con NC, a la que se sumó luego el PNC, porque ese fue el orden del pacto, lo tiene crudo en unas elecciones generales completamente polarizadas entre el PP y el PSOE. Yo se lo advertí a mis compañeros de CC, pero no me hicieron caso. Descartaron mi idea de pactar con el PP, sin ni siquiera estudiarla, cuando la realidad es que la mayoría de los partidos nacionalistas de centro-derecha se han sumado ya al más que probable cambio político que vaticinan todas las encuestas. UPN, PAR, Extremadura Unida y CCN lo hemos hecho antes de las elecciones, y Foro Asturias y el PNV han anunciado que lo harán después. El reciente ofrecimiento público del PNV de participar en un futuro Gobierno de España es la mejor noticia que les podían dar a Rajoy y al resto de los españoles, y supone, treinta y tres años después, la definitiva normalización democrática de España, porque el PNV no votó la Constitución de 1978. No ha habido un ministro peneuvista en un Gobierno de España desde la República. Sin embargo, CC decidió, sin consultarnos, pactar a contracorriente con Nueva Canarias, NC, una fuerza nacionalista filosocialista de Gran Canaria que preside hoy el expresidente del Gobierno de Canarias Román Rodríguez, que proviene de una escisión de Ican, que a su vez se constituyó de la antigua Asamblea Canaria Nacionalista, ACN, un partido nacionalista canario asambleario y de izquierda, y el Partido Comunista de España, PCE, representados, respectivamente, por el incombustible binomio político, Paco Santiago-Carmelo Ramírez, y el único e irrepetible José Carlos Mauricio, el último delfín de Santiago Carrillo.

CC se presenta a las próximas elecciones generales, que, como todo el mundo sabe, va a ganar el PP por goleada, de la mano de NC y el PSOE, con el indisimulado propósito de estallarse, y estoy seguro de que lo conseguirá. El CCN rechazó sumarse a ese disparate electoral y eligió pactar con el PP, antes de las elecciones, para que Canarias se asegure, en todo caso, un gran pacto político con quien va a ganar las elecciones, el PP, porque si esperábamos a hacerlo después a lo mejor no nos necesitan.

El CCN será los próximos cuatro años la voz canaria en Madrid, junto a los populares canarios, porque hemos firmado un gran pacto político, gracias al cual Canarias tendrá un nuevo Estatuto de Autonomía y recibirá más inversiones que nunca, porque el futuro Gobierno de Rajoy ha sido el primero que se ha comprometido por escrito a cumplir el REF e invertir en las Islas al menos la media nacional. Los nacionalistas debemos ser siempre prácticos y pactar con quien gobierne en España, porque, si no, no conseguiremos nada para Canarias. CC ha dicho que pactará con quien gane las elecciones; nosotros ya lo hemos hecho, porque nunca ha estado tan claro como ahora: las ganará el PP. El PSOE, Zapatero y su hasta hace poco vicepresidente, Rubalcaba, han hundido a España, y no estoy hablando solo de la economía, sino de algo menos tangible, pero que afecta a aquella. Nos han hecho perder la ilusión y sumidos en una gran depresión colectiva, como país, de la que solo podremos salir con el PP, porque con el PSOE va a ser que no.

El CCN se ha mojado en estas elecciones y pide abiertamente a sus votantes que apoyen a los candidatos y candidatas del PP y el CCN al Congreso y al Senado, porque serán, a partir del 20N, la única voz canaria en Madrid.

El CCN, la voz canaria en Madrid
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