ACN
El Equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife detuvo a un individuo de 26 años, identificado como S.L.C., acusado de los delitos de simulación de delito y robo, al comprobarse que era cómplice de un plan preconcebido con dos atracadores para cometer un robo en una joyería en el municipio tinerfeño de San Miguel de Abona.
Las investigaciones policiales se iniciaron el 30 de diciembre tras la denuncia presentada por el propietario de la joyería, en la que además aportó una cinta de las cámaras de seguridad del local donde se observa la entrada de dos individuos que ocultaban sus rostros con cascos integrales de motocicleta, llevaban guantes y uno de ellos esgrimía una pistola.
En su momento el empleado relató a los agentes de la Guardia Civil que después de ser intimidado con el arma había sido golpeado y obligado a la apertura de las vitrinas donde se mostraban las joyas.
En total sustrajeron joyas por valor de 120.000 euros y 1.900 euros en metálico, dándose a la fuga en una motocicleta, según relataba el único empleado que se encontraba en el establecimiento.
Una vez iniciadas las investigaciones por el equipo de delitos contra el patrimonio de la Guardia Civil, y tras descartar otras líneas de trabajo, se decantó en sus pesquisas hacía algún empleado de la joyería, máxime tras el visionado de las cintas de seguridad, donde observaron comportamientos anómalos en el robo con violencia e intimidación grabado.
A su vez la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía de Santa Cruz de Tenerife, trasladó a los agentes la confidencia de que una persona, empleado de la joyería, que estaba intentado vender 4 ó 5 kilogramos de oro y que exigía 30.000 euros a cambio de que la venta no quedara registrada en los libros establecidos al efecto y de control policial.
En la toma de declaración del detenido, se detectaron múltiples contradicciones, lo que llevó a un análisis minucioso de las grabaciones donde los agentes apreciaron detalles que señalaban al empleado como supuesto conocer del robo que se efectuaba.
Esta persona en un plan preconcebido amparado en la videograbación diera testimonio del robo, que no ofreciera dudas de la realidad y no pudiera vincularse con su persona.
La detención se adelantó al tener conocimiento los agentes que el empleado tenía adquirido un billete de avión para el día 12 de enero con destino a Venezuela. Ello motivó la detención el pasado día once y su puesta disposición de la Autoridad Judicial. Los agentes continúan con las investigaciones que permitan la detención de los coautores.
