Como cada año Cruz Roja prestó su inestimable colaboración con el trabajo de los Reyes Magos, a los que ayudan cada Navidad para que puedan llevar un regalo a cada familia de la Isla. La ONG recogió unos 1.600 artículos que llegaron el día cinco a las familias de 341 niños.
Estas cifras verifican el éxito de la campaña de Navidad de este año, que gracias a la solidaridad de los isleños recogió muchos más juguetes que en convocatorias anteriores. El llamamiento de la ONG a la población obtuvo una respuesta más que positiva con la congregación de cientos de personas en la Portería Solidaria,
Entre todos consiguieron llegar a los hogares que solicitaron una ayuda para mantener la ilusión de los niños, que confeccionaron sus listas para que estos peculiares pajes de Sus Majestades pudiesen conseguir los regalos que les esperaban en la mañana del día 6 de enero junto a sus zapatos.
Portería Solidaria
La Portería Solidaria es el nombre con el que se engloban las actividades que realiza la Cruz Roja en un punto de la Isla para convocar a los que deseen colaborar con esta buena causa.
En esta ocasión el lugar elegido fue el Pabellón de Tías, en el que además se celebró el Festival de Gimnasia Rítmica. Para acceder al recinto sólo se pedía una condición y era que trajeran consigo un regalo de los que se pedía en el listado de la Cruz Roja.
Estos juguetes podían ser de muchos tipos pero nunca usados ni con funciones violentas o poco educativas, unas características que no todos cumplieron y que hizo que el recuento final de regalos fuese de 1.000 a pesar de que llegaron a sus manos unos 1.600. Esta es la única condición que se exige a los que colaboran en esta campaña, y es que Cruz Roja prefiere no participar con los artículos que promueven pautas violentas, por lo que pistolas o juegos de guerra y armas quedaron desechados.
En este grupo de los desestimados estaban también los regalos de segunda mano, que siguen llegando caca año a pesar del ruego de Cruz Roja, que no entrega a los niños ningún regalo que ya haya sido estrenado. Aunque no fueron muchos, la ONG insiste en que este tipo de actitudes responden a una “solidaridad mal entendida” que nada tiene que ver con la intención de esta campaña, que quiere igualar la noche de Reyes para todos y no ofrecer lo que los demás no quieren.
Mararía, Cáritas y los ayuntamientos
En esta labor solidaria colaboran también otros colectivos como la Asociación Mararía, Cáritas y los ayuntamientos de la Isla, que se encargan de recoger y seleccionar los regalos, pero también de poner en contacto a las familias solicitantes de este servicio con los Reyes Magos.
A través de los ayuntamientos la Cruz Roja puede llegar a las familias de la Isla que tienen el perfil para acogerse a este servicio. Además, son los propios técnicos de los ayuntamientos los que reparten después los regalos antes del día cinco a Sus Majestades para que puedan hacérselos llegar a los niños.
En estas fechas toda ayuda es poca para Los Reyes de Oriente, y la colaboración de estos colectivos es indispensable para conseguir que nadie se quede sin sus deseos en esta noche.
Campaña de sensibilización
Para conseguir estos buenos resultados, Cruz Roja trabaja durante todo el año en los centros educativos, en los que realiza una campaña de sensibilización con los alumnos para que entiendan lo que significa la solidaridad, sobre todo en estas fechas.
No se trata de apelar a la compasión, sino más bien a poner los pies sobre la tierra a unos niños que en estos días se centran en los regalos que quieren recibir y en muchos casos se olvidan de valorar lo que tienen y lo que no es material.
Estas campañas no quieren hacer perder la ilusión a los pequeños, que entienden perfectamente que la labor de los Reyes Magos no es tan sólo traerles todo lo que apuntan en las cartas, sino la de atender a los niños de todo el mundo, que no viven siempre en las mismas condiciones que ellos.
