El presidente de Nueva Canarias, Román Rodríguez, arremetió contra el nuevo Gobierno canario, al que consideró débil y poco capaz de gestionar lo que queda de legislatura. En el programa A Buena Hora de Crónicas Radio de este lunes, afirmó que lo que han buscado no ha sido conseguir a los mejores políticos sino intentar revitalizar a CC en la isla de Gran Canaria.
Incidió una vez más en la importancia de que miles de canarios puedan ver sus votos reflejados en el arco parlamentario y en la necesidad de acuerdos nacionalistas que lo posibiliten.
- ¿Sigue empeñado en trabajar por el nacionalismo canario y que se puedan oír más voces en el Parlamento de Canarias?
- Sigo empeñado en trabajar por el nacionalismo canario y por la democracia. Si alguna cosa se ha puesto en evidencia estos días es que tenemos un sistema electoral absolutamente perverso. No hay ningún lugar donde una fuerza política con el 23 por ciento de los votos ostente el Gobierno de una comunidad, de un territorio o de un país. Eso es absolutamente insólito y deja fuera a cientos de miles de electores. En el último proceso electoral hubo 155.000 electores que votamos y que no tenemos ni un solo representante en el Parlamento, más de un 17 por ciento del voto admitido. Aquí, más que las razones del nacionalismo están las razones de la democracia. Habría justificación más que suficiente para buscar mecanismos de cooperación. Hay media de docena de parlamentarios que de tener un sistema democrático no estarían ahí sino otras personas como representantes del PIL o de NC, que disponiendo de apoyo popular no estamos por este sistema discriminatorio.
- A pesar de las discrepancias que tuvo en la última etapa con Adán Martín, habrá sido un disgusto grande su pérdida…
- Hemos compartido muchos años y fue una muerte esperada porque además, mi condición de médico me hacía conocer con más precisión, pero al final, la muerte aunque la esperes, siempre sorprende y entristece. Fue una persona que dedicó mucho de su tiempo a la política y al servicio público y mucha gente hemos vivido con pena su muerte.
- ¿Qué opina de la remodelación del Gobierno de Canarias de este fin de semana, una remodelación con tintes muy políticos y muy de Gran Canaria?
- Yo estoy enormemente preocupado porque los Gobiernos están para gobernar y para resolver los problemas y estamos ante un Gobierno débil, con sólo 19 diputados y sin apoyos externos que se sepan para poder gestionar lo que queda de legislatura. Creo que es un Gobierno poco capaz porque algunos de sus miembros han demostrado incompetencias manifiestas. El ahora consejero de Economía y Hacienda lo ha sido de Empleo y nos ha colocado a la cabeza de Europa en desempleo. Estas designaciones a personas de Gran Canaria responden a dos lógicas, primero porque ésta es una isla que tiene 850.000 habitantes y el Gobierno tiene que estar representado y los departamentos que estaban aquí gestionados por el PP los han dejado en sus manos en un intento de equilibrar al menos en las formas la estructura del Gobierno, y en segundo lugar, pretenden recuperar lo que no han hecho con trabajo y con ideas que es un partido desaparecido. Yo quiero recordar que en la anterior legislatura hicieron lo mismo, fue vicepresidenta del Gobierno y consejera de Sanidad María del Mar Julios y fue consejero de Economía y Hacienda, nada más y nada menos que José Carlos Mauricio, que tendrá todos los defectos pero que es un hombre formal y con criterio y fue Jorge Rodríguez el consejero de Industria y Energía y el resultado fue la práctica desaparición. Si creen que con estos cargos y menos con cargos de gente que no tiene espacio político ni votos ni personalidad van a recuperar la pérdida de crédito que tiene ATI en esta isla se equivocan.
- ¿Entonces ustedes no están preocupados en NC?
- En absoluto; primero porque el trabajo político afortunadamente no depende de estas cositas porque si no, sería muy fácil que una fuerza política con el 23 por ciento se consolidara. ATI va a seguir perdiendo votos en Canarias. Han hecho un pésimo trabajo, un pésimo Gobierno, que nos ha dejado a la cabeza del paro en España y con el peor sistema sanitario, el peor en los Servicios Sociales, en el sistema educativo, peleado con los ayuntamientos y cabildos, con una mala defensa de Canarias en Madrid porque el acuerdo que han firmado es papel mojado y no tiene contenido que justifique el apoyo a Zapatero. Estas son las cosas determinantes y tenemos un Gobierno en desequilibrio y estoy esperando la Ley de presupuestos para Canarias del próximo año para poder poner en evidencia a estos señores. Son tres títeres de Paulino Rivero en Gran Canaria. Lo intentaron con el señor Soria, siendo éste presidente de un partido importante así que la gente se puede imaginar qué pasa con estas personas que tienen escasamente 20.000 votos. Son subordinados y empleados que no van a modificar las cosas sino que lo más probable es que las empeoren. A mí esto no me preocupa en la parte política sino en la parte ciudadana ya que estamos en un momento grave de la situación política y necesitamos un Gobierno fuerte, justo lo contrario de lo que tenemos.
- Ellos han acusado a NC de que mientras ellos han recortado el Gobierno, NC tiene muchos altos cargos dentro del Cabildo, que el único proyecto que tienen, aparte de estar acusándoles a ellos de estar dirigidos por ATI es el proyecto de tren y que si tan malos son los presupuestos acordados con Zapatero, ustedes están gobernando con el PSOE en el Cabildo. ¿Qué responde?
- Que son argumentos de baja estopa y ya me gustaría tenerlos delante para discutirlos con ellos. Lo que pasa es que en esta isla no tienen representación y es muy difícil discutir de política con ellos. Primero, en cuanto a los presupuestos, se ha suscrito un acuerdo con dos apartados, uno de carácter presupuestario y otro de otro tipo de medidas de orden político e institucional. En el apartado del presupuesto, Canarias aparece en materia de inversión 242 millones por debajo de la media y se incumple de manera flagrante el artículo 96 del REF que dice que los canarios tenemos derecho a estar en la media de inversión. Por esta razón, ATI-CC fue al Tribunal Constitucional en el 2008 y todavía no ha respondido. Por lo tanto, somos una comunidad con mucho paro y un grave deterioro económico en el que el Estado invierte 242 millones por debajo de la media y están en la media Andalucía, Aragón, Cataluña, Baleares y Castilla León porque en sus estatutos pusieron una cláusula para cumplir este planteamiento. No hay rastros del Plan Canarias. Ellos también catalogaron como acuerdo histórico el Plan Canarias hace un año y hoy ese Plan es humo y concreciones menores y lo ha dicho gente de su propio partido o del Partido Popular. No hay rastro de los 2.500 millones de euros. En cuanto a la financiación autonómica, 545 millones por debajo de la media según decía el consejero de Economía y Hacienda, que ya no lo es hace varias semanas en el Parlamento. Lo que han conseguido son unas enmiendas de última hora que suponen 10 millones de euros para Tenerife, 600.000 euros para Gran Canaria, 800.000 euros para La Palma y 400.000 euros para Lanzarote, Fuerteventura, La Gomera y el Hierro y eso está en los papeles, lo que supone un desequilibrio más y que en términos presupuestarios, no sólo no existen cambios significativos sino que estamos colocados a la cola, sin ningún tipo de avance. La parte política del acuerdo supone cuatro situaciones, modificación del REF, un papel con epígrafes que identifican líneas de cambio sin consensuar con los otros partidos, ayuntamientos, cabildos ni con la sociedad canaria. Siempre que se ha modificado el REF y yo he sido presidente del Gobierno, la condición era el consenso local. Esto es una declaración de intenciones, un brindis al sol y la inmensa mayoría de sus contenidos son imposibles. El segundo punto es la reforma estatutaria y aquí está la victoria política entre comillas. Lo que consigue ATI con este acuerdo es que no se modifique el sistema electoral para dar cobertura a perversiones como las que estamos viviendo ahora. Esto sí que lo han conseguido. El tercer punto son las aguas canarias. En el documento suscrito yo le garantizo que los pasillos de agua entre Gran Canaria y Tenerife siguen siendo aguas internacionales. No se gana ni un metro para las aguas canarias. No hay ni una competencia más por parte de las instituciones canarias en esta materia. No ha cambiado sino la denominación para confundir pero los expertos concluirán que no hay nada. En la cuarta cuestión, que son las políticas activas de empleo, lo único que se consigue y estamos de acuerdo, es transferir a los inspectores de Trabajo y Seguridad Social a la comunidad autónoma que es una vieja reclamación pero está por ver el resto de políticas activas. Algunas ya las tenemos, como las de intermediación y formación, que ya las he gestionado yo siendo presidente del Gobierno y falta la posibilidad de que las bonificaciones a las empresas las haga la comunidad canaria y esto está pendiente de un convenio. Dentro de 90 días los canarios tendrán claro que nos han vuelto a engañar y que no hay nada de nada. Lo que necesita Canarias es dinero para generar empleo y riqueza y han renunciado a eso por la pírrica victoria de una reforma electoral.
- En cuanto a las posibles alianzas, ¿ya se sabe cómo van a ser las cosas con el PNL en Lanzarote?
- No se sabe todavía. Nosotros queremos reconstruir un espacio del nacionalismo del centro progresista, respetando la singularidad e idiosincrasia de cada lugar. Nosotros hemos avanzado en la isla de Gran Canaria de manera notable en la organización de los nacionalistas y por eso tenemos seis alcaldías, cogobernamos en el Cabildo y vamos a mejorar de forma sensible porque hemos hecho un buen trabajo y lo dice la gente, las encuestas y los adversarios. De hecho, la composición del nuevo Gobierno no responde a las necesidades de tener un buen Gobierno sino de ver si pueden paliar su práctica desaparición en esta isla y eso es algo que todo el mundo ha comprendido. Nosotros pretendemos que los acuerdos vengan desde la isla hacia el archipiélago pero no sabemos a qué nivel pero razones estrictamente democráticas justificarían el acuerdo para que no existan miles de ciudadanos que no estemos en el Parlamento y que no se cuelen impostores por este sistema excluyente.
