Fotos: Jose Curbelo
Centenares de personas se dieron cita este domingo a la una de la tarde alrededor de la pequeña explanada de la prisión de Tahíche para acudir a la llamada efectuada desde el Partido de Independientes de Lanzarote (PIL) para protestar por la situación de su líder, Dimas Martín, y solicitar al Gobierno que atienda la petición de más de 13.000 firmas que no quieren otra cosa que se conceda el indulto parcial. No quieren otra cosa que su guía político esté en la calle. Había que competir con Fernando Alonso, que en ese momento se la jugaba en el Gran Premio de Gran Bretaña de Fórmula Uno, y finalmente, según la estimación de los independientes, ganaron el difícil pulso. Pocos dirigentes del partido se quisieron perder el evento. Junto a los dos hijos que están al frente de la Vicepresidencia del Cabildo y del Ayuntamiento de Teguise, Fabián y José Dimas Martín, se dejaron ver personas como Plácida Guerra, María José Docal, Florián Corujo, Conchi Álvarez, Gladys Acuña, Antonio Hernández...
Con la habitual puesta en escena de este partido (había hasta aparcacoches) y con su habitual puntualidad, Matías Curbelo fue el encargado de ir dando paso a cada una de las personas que intervinieron desde el improvisado escenario. El primero en hablar fue el presidente de la formación, Antonio Hernández, que dio las gracias a todo el mundo que había acudido a la cita a pesar del día y del calor. Además, aprovechó para recordar que la situación de su “compañero y líder” tiene que ver únicamente con su deseo de ayudar al agro insular, “a los agricultores”. “Otros se han enriquecido y se han dedicado a especular y no les ha pasado nada”, señaló en tono sereno, para insistir una vez más en lo injusto que resulta que esté entre rejas por un caso que sucedió hace veinte años. Así, invitó a los presentes a mantenerse unidos para protestar por los siete meses que lleva ya Dimas Martín en prisión y para que el Gobierno central, que es quien tiene potestad para hacerlo, atienda las más de 13.000 firmas presentadas solicitando el indulto parcial que le permitiría abandonar el centro penitenciario.
Tras Hernández intervino Susana Martín, hija del líder del PIL que quiso hablar en nombre de sus otros tres hermanos. Fue breve. También dio las gracias a los presentes y a pedirle a su padre que aguante un poco más de lo que ya ha aguantado, convencida como está de que ya le queda poco. “Volverá a disfrutar de las comidas en familia de los domingos y volverá a disfrutar de sus nietos”, dijo, resaltando lo mal que llevan en la familia esto último, que no esté disfrutando de sus nietos. Concluyó con un mensaje claro y contundente: “nos sentimos orgullosos de ser hijos de Dimas Martín”.
Conchi Álvarez, integrante del grupo de gobierno de San Bartolomé, fue la encargada de leer el manifiesto del PIL. En él, sus firmantes consideran que Dimas Martín “por haber sido el dirigente político insular que ha contado con más apoyo electoral en las urnas y más alta valoración personal entre los habitantes de la Isla, y no de forma puntual sino a lo largo del pasado siglo XX, se encontró con la animadversión de unos adversarios que en algunos casos se convirtieron en enemigos, quienes no han escatimado esfuerzos para iniciar procesos judiciales encaminados a apartarlo de la vida política de Lanzarote y de Canarias”. “Creemos que con este excesivo celo se han utilizado los tribunales de justicia para alcanzar ese objetivo y que actualmente se ha logrado condenarlo a privación de libertad y encierro”, añadió, para resaltar acto seguido que “no pesa sobre Dimas Martín un caso de corrupción política ni de enriquecimiento ilícito, ni de ningún supuesto de carácter privado, sino por las acciones llevadas a cabo a favor del agro insular y de sus agricultores en particular, sin que hasta hoy se conozcan perjudicados de sus acciones”.
En otro orden de cosas, Álvarez comentó que “parece contradictorio que unas islas donde a diario saltan a la opinión pública supuestos casos de corruptelas urbanísticas con enriquecimientos dudosos sin que se conozca que a lo largo de estos años se haya condenado a ningún acusado de estas posibles corruptelas se prive de libertad a un ciudadano como Dimas Martín, que en su época de alcalde habrá sido de los pocos en Canarias que nunca calificó un metro de terreno sino muy al contrario llevó a cabo acciones encaminadas a salvar de la voracidad urbanística a importantes sectores medioambientales como fueron los Jables de Famara y la propia Isla de La Graciosa”.
De igual modo, la concejal de San Bartolomé dijo en nombre de sus compañeros que consideran “innecesaria, extemporánea, pesada e injusta la pena que soporta, que sólo provoca sufrimiento en su persona, familiares y amigos”, motivo por el que aprovecharon la ocasión para solicitar que hagan más liviana la pena y se le conceda la libertad.
