FOTOS: JOSE CURBELO
Rodeado de unas medidas de seguridad propias de una estrella de masas, Carlos Baute llegó este jueves a la zona del Varadero para atender a la prensa local antes del concierto que ofreció por la noche para inaugurar los Carnavales de Puerto del Carmen. Tal vez porque sus fans no se enteraron de su presencia en las
Aún así, toda medida de precaución parecía poca para proteger al cantante, y la entrada a la sala de El Fondeadero, en la que compareció junto al alcalde de Tías, José Juan Cruz Saavedra, estaba vetada a cualquier persona que no pudiese acreditar su interés profesional por las palabras de Baute. Así evitaron la entrada de los aficionados, que en realidad no parecían estar especialmente interesados en conocer de cerca al cantante a juzgar por la ausencia de curiosos. Todos se perdieron la posibilidad de ver al nuevo Baute, que lució como el artista de caché en el que parece haberse transformando desde que viniese a la Isla hace más de siete años con su famoso tema “Mi medicina”.
Eso sí, el cantante se mostró encantador ante las cámaras en los diez minutos exactos que su representante permitió a los periodistas sacar provecho al discurso de este ídolo de los jóvenes. Baute no olvidó agradecer al Ayuntamiento, a los medios y a todo su público el apoyo a su carrera, que entró en las listas españolas, como la de muchos cantantes latinos, utilizando Canarias como puente para triunfar en el mercado español.
“Es totalmente sintomático en mi caso y en el de otros artistas latinos el tener éxito aquí para luego pasar a la Península”, reconoció el artista, que comenzó su carrera musical en el Archipiélago con el lanzamiento de su tercer álbum, “Yo nací para querer”, en el año 2000.
Baute entró con fuerza con los éxitos de este trabajo, en el que mezclaba la música típica de Venezuela, su tierra natal, con percusión afrocaribeña y elementos pop, un estilo propio con el que batió records de venta en las Islas. Ya en el año 2001 visitó todo el Archipiélago en la gira de promoción de su disco, todo un éxito que lo catapultó al resto de España.
Esta primera experiencia en Canarias parece haber marcado para siempre un sentimiento de hermanamiento y gratitud a los isleños, a los que siempre dedica un hueco en sus giras.
Otra visita a la Isla
Esta es la tercera vez que Baute actúa en Lanzarote, y después de haber conocido el resto de las Islas reconoce que “es una de sus favoritas”. “Lo que tiene aquí es un paraíso, cuídenlo, lo que tienen es oro puro”, añadió el artista, que visitó en esta ocasión casi todos los municipios.
Como cualquier turista, Baute visitó la Cueva de los Verdes y los Jaemos del Agua en su recorrido por la Isla, pero también tuvo tiempo de disfrutar de los placeres que brinda el buen clima y el mar.
“Me encanta estar aquí, me lo paso pipa porque soy surfero y me apasiona el deporte de agua”. Por eso aseguró que antes de irse y después del desgaste del espectáculo de la noche “a las 8 de la mañana voy a estar metido en el agua”, una imagen que seguro que muchos de los fans intentaron plasmar en sus cámaras si consiguieron encontrar el lugar en el que venezolano se lució en bañador.
Y es que no hay que olvidar que uno de los principales atractivos con los que cuenta el artista es precisamente su físico, un talento natural al que le ha sabido sacar el máximo provecho.
Ya en la rueda de prensa, Baute cautivó a la cámara con sus guiños y estudiadas sonrisas a la lente. El estilo latino y desenfadado de su vestuario y su pelo hacen el resto. Como ídolo juvenil no tiene precio y el show que protagoniza sobre el escenario lo demuestra, aunque su atractivo traspasa las fronteras de los gustos generacionales y atrae a un público más variado del que se podría esperar, como se comprobó después en el concierto.
Un recopilatorio muy joven
A pesar de su juventud, el trabajo que Baute presentó en Puerto del Carmen es un recopilatorio de las canciones que más han atraído al gusto del público. La idea de lanzar este disco fue de la propia discográfica, que le pidió que “dejase” algo en España antes de partir hacia Méjico, en donde residirá el próximo año por motivos de trabajo.
“Esto es lo único que voy a estar haciendo acá y por eso me pidieron que antes de que me fuese y abandonase el mercado por más de un año, les dejase algo y entonces compuse un par de temas más, que se llaman uno Vivo enamorado y otro Estás hecha para mí, y el resto son mis grandes éxitos”.
Con estos temas se presentó anoche ante el público lanzaroteño, que coreó sus temas más conocidos y disfrutó de otros nuevos que el cantante compuso y ofreció en Latinoamérica, pero que aún no han sonado en España, sus “pequeños grandes éxitos”, como los definió el artista.
La gira le ha llevado ya por los Carnavales de Tenerife y
La Palma, en donde participó también de su fiesta después del espectáculo, una intención con la que llegó también a Puerto del Carmen, a donde llegó con la ilusión de “arrancar la fiesta con mucha fuerza”.
