jueves. 28.03.2024

El portavoz del Partido Popular en el Cabildo insular, Francisco Cabrera, insta al Partido Socialista a dar cuentas a los ciudadanos sobre su gestión al frente de los Centros Turísticos y a negar, si se atreve, el contendido de la auditoría que el Cabildo entregará a la Fiscalía para comprobar si ha habido delitos en la administración de los bienes públicos. El también candidato popular al Cabildo recordó que su formación, que había tomado la iniciativa de crear una comisión de investigación que abordara el caso de los CACT, no se prestó al “paripé” que, según él, pretendía hacer el consejero socialista Manuel Fajardo Palarea con dicha comisión. “Nosotros solicitamos que se aportase el resultado de la auditoría y ellos (el PSC) retrasaron casi un año el encargo de esa auditoría”, dijo Cabrera, quien además sostuvo que era compromiso de Fajardo Palarea dar traslado a la Fiscalía de las conclusiones de la comisión de investigación, “pero nunca las llevó”.

Para Cabrera es contundente el resultado de la auditoría de los CACT. “Los socialistas se gastaron más de120.000 euros en publicidad, 84.000 euros en suministros y quedó demostrado que más del 60 por ciento de las contrataciones que se hacían, tanto de gastos como de personal, eran a dedo”. Cabrera señaló que es un verdadero desastre y precisamente un ejemplo de lo que nunca se puede hacer en la gestión pública, “ya que llevaron los Centros Turísticos prácticamente a la ruina”. Un informe jurídico externo encargado por el actual grupo del gobierno del Cabildo obliga en sus conclusiones a poner en conocimiento de la Fiscalía la gestión pasada de los Centros.

Pésima gestión

La actuación de los socialistas, según Cabrera, pone de manifiesto dos modelos de gestión. Uno, el que representa el Partido Socialista, que va camino a la Fiscalía, la gestión de los años 97 a 2003 y, otro, “el equilibrio económico que le dimos nosotros al Cabildo evitando la catástrofe total”. En este sentido, Cabrera destacó el trabajo de la ex consejera de Economía y Hacienda, Astrid Pérez, y del economista Eugenio Lorenzo. Cabrera cree que ahora, cuando se acercan las elecciones, son hechos que los ciudadanos de Lanzarote deben valorar. Cabrera subrayó que el candidato socialista a la alcaldía de Arrecife, Enrique Pérez Parrilla, fue el presidente del Cabildo durante los dudosos años de los Centros Turísticos. “No creo que haya un ciudadano en Lanzarote, después de ver la gestión del PSOE en los Centros, que vote a un partido que ha hecho un desastre con la economía del Cabildo insular”, señaló Cabrera.

Cohecho, prevaricación, supuesta malversación de fondos públicos, nombramientos ilegales y tráfico de influencia, son para Cabrera realidades que el Partido Socialista no puede ocultar. Entre tanto, la población de la Isla estaba y sigue estando desasistida en necesidades primarias. Además, Cabrera dijo que el PP tomó la decisión de refinanciar en su día la deuda del Cabildo con las entidades financieras y recuperar la credibilidad porque la situación en 2003 era tan caótica que peligraban las nóminas de sus empleados.

Falta de soportes

En todo caso, Cabrera realzó que lo más grave de la auditoría de los Centros Turísticos es que los autores de la misma reconocen que en determinados aspectos de la investigación no pudieron seguir todos los parámetros y precisamente los socialistas se agarran de ahí para decir que no se puede calificar el informe de auditoría. “Es grave porque no dejaron documentación y por ello no se pudieron auditar ciertos asuntos”. Cabrera agregó que no pudieron acreditar cómo se gastó el dinero. En definitiva, piensa que ahora cuestionan el trabajo de los auditores para intentar distraer la atención y ocultar la nefasta administración que ejecutaron en los Centros Turísticos.

También en Inalsa

El PP sostiene que la mala gestión del PSC no está circunscrita a los Centros Turísticos sino que toca otro sector estratégico de Lanzarote como la producción y distribución del agua. En Insular de Aguas de Lanzarote (Inalsa), aseguró Cabrera, el Partido Socialista dejó una deuda de 24 millones de euros, “llevándola prácticamente a la quiebra”.

Cabrera denuncia que el PSC dilató el encargo de la auditoría de los CACT casi un año
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