Por Martino
Números cantan, señores. Si decimos que uno de cada cuatro habitantes del mundo es chino, podemos llegar a la conclusión de que uno de cada dos chinos habita en Lanzarote, aunque no se dejen ver tanto por la calle como otras etnias, más bien se les percibe en sus comercios o trincando a modo en las máquinas tragaperras. Todo esto nos puede llevar a pensar que al menos el rollito de primavera, aunque sea otoño, lo tenemos garantizado.
No hay duda, de seguir así, los chinos se comen el mundo con palillos, de momento le están dando un vuelco a la industria y al comercio que válgame la Macarena, cristiano. Ellos mismos, con su mecanismo, se lo hacen todo, alquilan o compran los mejores locales en los mejores sitios, primeras líneas de playa y calles más céntricas de Arrecife, ciudad sin ley...urbanística, antes de que estuviera de sheriff DON PÉREZ PARRILLA CORPORATION, ellos llevan a cabo las obras pertinentes de carpintería, fontanería y lo que haga falta, dando al traste con los comercios anteriores, abriendo locales puerta con puerta, aunque todos, damos fe sin ser notarios, vendan lo mismo o similar.
Ya cunde la alarma, el eslogan es contundente: “ O TE ACHINAS O TE ARRUINAS”, lo pueden usar que les cedo los derechos. Tal y como dice un buen amigo, bebedor de tropical y lo que se tercie: “ Hay más chinos que botellines”. Imaginen, y no es coña, si cada chino tuviera un frigorífico, la Tierra se hubiera desintegrado de calor por el efecto invernadero y eso tan sobado del calentamiento global, nada que ver con los “globos” de silicona de YOLA BERROCAL, que deben estar fríos, tipo “ blandiblú”.
No crean que exagero, los chinos, trabajadores hasta la extenuación, a la fuerza ahorcan, y bien preparados, se comen al mundo con soja y salsa agridulce y a nosotros nos dejan el ...pan de gambas. Insisto, suelen ser trabajadores y bien preparados, de ahí que no haya ningún político chino en Lanzarote, aunque, y me van a perdonar por el atrevimiento, hubo una época en la que, no sé si porque tendría molestias de hígado o porque iba el hombre estreñido, en que llegué a preguntarme si CÁNDIDO REGUERA, nuestro hombre en Madrid, era o no era chino. ¿ Ustedes qué opinan? Mójense, coño, no me van a dejar sólo. Es una broma , CÁNDIDO, no me retires el saludo que ya me quedan pocos políticos amigos y eso me hace pensar si es que, por una vez en mi vida, voy por el camino correcto.
NOTA: Imaginen cómo diría un chino la frase: “ Los perros del Curro no me dejan dormir”. En español, claro. Pues que se los afeite, carajo.