El Comité Permanente de Coalición Canaria (CC) de Lanzarote, reunido ayer en Arrecife, decidió instar a todos sus grupos políticos en el Cabildo y ayuntamientos de la Isla a presentar una moción al Pleno de las corporaciones de la Isla para que soliciten al ente público Aeropuertos Nacionales y Navegación Aérea (Aena) que mejore los servicios y las instalaciones de la Terminal 2 (T2) del aeropuerto de Lanzarote.
El Comité Permanenente de CC se adhiere así a la moción presentada la pasada semana por su concejal en el Ayuntamiento de Tías, Juan Cruz Sepúlveda, en la que propuso al Pleno que solicitara a Aena la adopción de “medidas correctoras pertinentes a la mayor brevedad y dignifique la calidad a los usuarios conejeros que se desplacen entre las islas”.
Los nacionalistas lanzaroteños presentarán por lo tanto una moción para solicitar formalmente a la entidad pública empresarial adscrita al Ministerio de Fomento “la ejecución de medidas que mejoren los servicios y las instalaciones de la T2 del Aeropuerto de Lanzarote, de uso exclusivo para vuelos regionales, y dignifique así la calidad del servicio que se presta a los usuarios”.
Según el texto de la moción, con la puesta en funcionamiento de esta terminal se ha producido una “perdida considerable del la calidad en el servicio que se presta a los viajeros, que antes hacían uso de la Terminal 1, mejor equipada que la anteriormente citada”.
El deterioro de las prestaciones que se ofrecen a los viajeros y acompañantes en la T2 se basan en aspectos tales como la inexistencia de un estacionamiento limitado para dejar y recoger a los usuarios a las puertas de la terminal o en la escasez de plazas y precio elevado de la zona de aparcamiento. Además, no se ofrece alternativa de uso de espacios gratuitos.
CC argumenta a su vez la deficiencia de los servicios complementarios que se ofertan en las instalaciones aeroportuarias, “ya que la cafetería es pequeña y no se atiende correctamente al público por falta de espacio, no hay un puesto de venta de periódicos y revistas, y se echan en falta otros servicios, tales como una pequeña farmacia”.
Además, “son insuficientes los mostradores de facturación y los puestos de control de los pasajeros. Se aporta información imprecisa a los usuarios y los baños están mal atendidos. Todos estos aspectos hacen que la T2 diste mucho del encanto que tenía la terminal diseñada por el artista lanzaroteño César Manrique, donde imperaba la comodidad, la luz, los aspectos naturales y la originalidad en el diseño”, sentencia.
