jueves. 28.03.2024

Fotos: Anabel Navarro

Coches de la Policía Local de Arrecife, ambulancias del Servicio de Urgencias Canario (SUC) y de Cruz Roja haciendo sonar sus sirenas por el centro de la ciudad, una embarcación de Salvamento Marítimo rescatando a una persona de un pequeño barco pesquero enfrente de la playa de El Reducto, un helicóptero sobrevolando la zona provocando un ruido ensordecedor... Todos los indicios apuntaban a una tragedia, pero nada más lejos.

La Concejalía de Sanidad y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Arrecife organizó ayer un taller de primeros auxilios que incluía una simulación completa de un rescate en el mar. Sin embargo, el fingido rescate acaparó durante casi una hora la atención de los transeúntes que circulaban por la zona de El Reducto.

Los bañistas de la playa se miraban unos a otros encogiendo los brazos al no saber qué estaba sucediendo. “Ahí está pasando algo gordo”, le comentaba una señora a su marido que se protegía los ojos con un periódico doblado para poder divisar mejor la escena.

Una pequeña barca pesquera fingía estar ardiendo, con el fuego de una bengala, a unos metros de la orilla. Poco después, una embarcación de Salvamento Marítimo aparecía para rescatar al supuesto tripulante en apuros. Al rato, un helicóptero se acercó hasta la zona para elevar, mediante una cuerda de acero conectada a una camilla, al naufrago desde la embarcación de Salvamento Marítimo hasta el vehículo aéreo para, finalmente, trasportarlo desde el mar hasta el Recinto Ferial.

Como si realmente el naufrago precisara atención médica, una ambulancia de Cruz Roja lo trasladó hasta el Hospital General de la capital lanzaroteña para concluir el simulacro que resultó, a los ojos de muchos ciudadanos, tan real como la vida misma.

“Ahí está pasando algo gordo”
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